¿Quiénes somos?


Somos estudiantes, graduados y docentes independientes, es decir que no respondemos a ninguna otra organización partidaria, estatal o religiosa. Consideramos que esto debe ser así porque como sujetos autónomos no queremos hacernos de recetas ya escritas de antemano por otros. Estamos convencidos  de que a la realidad injusta que padecemos no la vamos a cambiar nosotros solos. Es por ello que compartimos nuestras acciones y convicciones con otras organizaciones estudiantiles, movimientos de trabajadores ocupados y desocupados, hermanados por la búsqueda del cambio social. No tenemos recetas, pero si sabemos qué ingredientes no pueden faltar en nuestra cocina: 


Autonomía: en primer lugar, no podemos ser autónomos si no nos involucramos con aquello que queremos transformar. Queremos construir las leyes que nos organicen, que no suponen ningún limite a la opinión.. Por ello no estamos inmersos en ninguna estructura superior que pudiera condicionarnos.


Crítica: la autonomía es nuestra base y motor para ejercer la crítica, necesariamente para mantener la capacidad de ver y actuar con criterio propio. Le escapamos al pensamiento dogmático, porque no permite la reflexión y no da lugar a la diversidad de visiones. Nuestra propuesta es cuestionar las experiencias para aprender a la existente, en el territorio de la facultad.


Participación: fundada en que cada persona es igual a todas las demás y tiene la misma legitimidad para participar de todo aquello que afecte la vida colectiva. No somos iguales, desde ya, en los modos de ver las cosas; por ello, en esa confrontación de ideas, no en la imposición vertical donde se construyen herramientas colectivas para garantizar el cumplimiento de los derechos que todos tenemos por igualla diversidad de subjetividades es lo que impulsa nuestra práctica colectiva.


Horizontalidad: es la toma de decisiones y la distribución de las responsabilidades, lo cual supone ejercer constantemente la autocrítica, individual y colectiva. A su vez, esto nos impone la responsabilidad de formarnos constantemente, para no ¨tocar de oído¨. Como dicen los zapatistas, ¨mandamos obedeciendo¨…


Democracia directa: lo proponemos como mecanismo de decisión que garantice la participación y el empoderamiento de los miembros de toda la sociedad, defendemos las diferencias como partefundante de los procesos de búsqueda de consenso en la búsqueda de una sociedad igualitaria. 


Principios y prácticas de Izquierda: los entendemos como aquellos que persiguen en modo de organización social a la igualdad entre las personas en todos sus aspectos, no sólo en los materiales, no nos ajustamos a las prácticas dogmáticas e inmóviles de la izquierda partidaria, pero sí retomamos las reivindicaciones de una sociedad justa, sin divisiones de clase, para enriquecerlos, con los pies en nuestra realidad. Entendemos que no sirve encorsetar la realidad a teorías cerradas, sino que tenemos que elaborar las teorías en base a nuestra realidad, a nuestro presente.